Cada cojín en sus 40cm de ancho y alto es como un pequeño jardín textil: distinto, vivo y lleno de detalles. Confeccionados a mano en lino suave y con estampados florales únicos, estos cojines cuadrados están pensados para aportar color, calidez y carácter a cualquier rincón de casa.
Disponibles en tres tonos distintos, pero unidos por una misma armonía, no hay dos iguales: cada uno florece con su propia personalidad. Son perfectos para combinar entre sí, renovar un sofá, vestir una cama o crear un rincón de lectura lleno de alma.
Un gesto sencillo que transforma el espacio, como lo haría un ramo de flores recién recogidas.
